En el marco de la sesión de honor por los 197 años de la independencia de Bolivia, el presidente Luis Arce denunció que “hay intereses internos y externos para desestabilizar” a su gobierno.
“Desde nuestra patria, que hoy conmemora su aniversario independentista, también debemos reflexionar profundamente desterrando los intereses de pequeños grupos y las peleas fratricidas”, afirmó el mandatario boliviano.
Acto seguido y sin identificar a los protagonistas, denunció: “Hay intereses internos y externos para desestabilizar nuestro gobierno democráticamente electo, así que no podemos perder de vista la unidad del pueblo como condición indispensable para avanzar”.
En ese contexto, “cuando el mundo está en turbulencia”, consideró que “es con trabajo diario, solidaridad irrenunciable, imaginación e iniciativas permanentes de diálogo como vamos a enfrentar estas dificultades”.
Estado en la economía
Arce subrayó que el Estado a través de las diferentes empresas estatales están respondiendo a las necesidades de la población como son la soberanía alimentaria, la sustitución de la importación de combustible y la exportación de urea.
Para mejorar la producción de alimentos, Arce indicó que se tiene previsto destinar, en primera instancia, $us 35 millones para el proyecto de riego que beneficiará a 47 municipios y los productores, de cebollas, tomate y papa, que tengan predios productivos de 5.000 hectáreas.
En una segunda etapa se van a destinar $us 500 millones para un riego tecnificado, construcción de represas, embalses y recuperación de cuencas que tendrá un impacto en los nueve departamentos del país.
En cuanto a la reducción de la importación de combustibles, Arce remarcó que se pondrá en marcha la producción de diésel ecológico un aspecto que permitirá al Estado ahorrar sus recursos.
Otro aspecto que subrayó el primer mandatario fue el plan de vacunación, que a su criterio fue eficaz, lo que permitió una gradual reactivación de la economía y un descenso en la letalidad del Covid-19.
Unidad de los bolivianos y censo ya
El presidente manifestó que actualmente se vive momentos de cambios trascendentales y que se debe estar atentos a posibles actos que busquen la desestabilización de un Gobierno democráticamente elegido.
Para evitar esto, Arce indicó que la es clave la unidad del pueblo boliviano, palabras que despertaron el apoyo de los legisladores oficialista que gritaron ¡Lucho!, ¡Lucho! Y en respuesta los de oposición pidieron ¡Censo ya!, ¡Censo ya!
Situación que obligó al presidente a levantar el tono y cerrar su mensaje recordando que Bolivia es un referente internacional del crecimiento y la justicia social.